Música relax

Bellos corazones que siguen Mi Historia... Tu puedes ser parte de ellos... pulsa participar..!

jueves, 17 de diciembre de 2009

El miedo en la pareja





Cuando el miedo forma parte de la relación, esa pareja no tiene perspectivas posibles sanas. Cuando decidimos en función de evitar una reacción, nos defendemos a partir de la expresión miedosa, entonces todas nuestras conductas giran en torno a evitar lo que nos preocupa y se impone un sentimiento que evita cualquier vínculo y lo condiciona.
Cuando no podemos ser objetivos, porque ponemos nuestra subjetividad y afloran todos los temores del pasado para dar forma a los acontecimientos del presente, cuando decimos que sí por no errar, para no desafiar, para no atormentar y evitar así esa conducta hacía nosotros, que interpretamos como miedo, entonces seguramente el vínculo en cuestión que nos despierta esta emoción, muestra un severo defecto.
El miedo no nos da opción alguna. Es tan poderoso que cede ante la primer impresión que desata la serie de reacciones complejas por todo nuestro organismo, que al principio cuesta descifrar, pero de a poco reconocemos como respuestas motivadas por el temor.
El miedo va creciendo en ola y cada vez toma mayor dimensión. Cuando el otro entiende su dominio, entonces cada vez nos enajenamos más de la situación y aceptamos con la sola intención de evitar lo que nos atemoriza.
Los temores van desde amenazas directas a señales de alarma que provocan cierta desentonación y que llevan a la discusión, la mayoría de las veces la situación nos sobrepasa y el miedo gobierna nuestro cuerpo entonces tomamos el camino más fácil con tal de salir enteros y esta conducta se limita a obedecer o callar.
El miedo es una forma de sobornar nuestra inteligencia y aplacando la posible razón que nos permitiría sentir que podemos enfrentar al otro de otra manera.
Noto ese miedo abrumante en parejas que consultan porque han sido dominadas por mucho tiempo y no han podido salir de esa situación, llegan con una autoestima sumamente baja y con temores casi infundados, no saben a ciencia cierta sí en el lugar en que asisten podrán ser ayudados, temen perderlo todo sí enfrentan la situación de dominio, porque están ciegos y no pueden reconocer que lo que pueden perder lo ganaran en mejor estado anímico y de salud, una mejoría que se nota inmediatamente cuando pueden desvincularse y volver a adquirir autonomía.
El miedo tiene un poder que desintegra de a poco, el individuo va cediendo todo, renuncia, acepta, concede, hasta que queda vacío de personalidad, es como sí lo hubiesen chupado y termina siendo un títere o instrumento del otro, porque sí pensase en enfrentar su miedo y empezar a pensarse a sí mismo sabe que algo cambiaría y los cambios también imponen miedo, el miedo despierta su angustia, la angustia lo paraliza, lo desconcierta y lo limita exacerbadamente.
Demas esta decir amigos/as que una pareja nacida o concebida en el miedo de cualquiera de las dos partes es candidata a no prosperar y sucumbir...
Hasta la proxima...!
                                        KASPER

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por dejar tu comentario. Muchas suerte! Buena vida...!